Ni los jueces escapan a la inseguridad
POPAYÁN
En Popayán, ni los jueces se salvan de la inseguridad. A esta casa periodística se acercó una funcionaria de la Rama Judicial para denunciar la agresión que padeció por parte de unos delincuentes, quienes al final se apoderaron de sus pertenencias.
Según la jueza afectada, el hecho se registró en pleno centro de la ciudad, en inmediaciones de la iglesia San Agustín y cuando se encontraba realizando compras de regalos y ropa en los locales ubicados en el lugar.
“La situación se registró cuando parqueaba mi carro porque pensaba adquirir una mercancía. En ese momento sentí que alguien golpeaba la puerta del conductor, robando mi atención pero era una patraña para que el otro sujeto se apoderara de mi bolso, aprovechando mi descuido”, indicó la funcionaria.
En medio de la tensión de la situación, la víctima descendió rápidamente del automotor para pedir ayuda. De esta forma, ciudadanos solidarios y policías que estaban cerca, salieron en ayuda de la representante de la ley, capturando a la persona que se prestó para facilitar el hecho delictivo. Esta última fue trasladada a las instalaciones de la URI, quedando así a disposición de la Fiscalía.
“Uno se pregunta si esas cámaras de seguridad están cumpliendo con el objetivo que tiene, salvaguardar al ciudadano. Es triste que esta situación se registre porque ya uno no quiere caminar por su ciudad por culpa de los delincuentes” acotó la afectada.
POPAYÁN
En Popayán, ni los jueces se salvan de la inseguridad. A esta casa periodística se acercó una funcionaria de la Rama Judicial para denunciar la agresión que padeció por parte de unos delincuentes, quienes al final se apoderaron de sus pertenencias.
Según la jueza afectada, el hecho se registró en pleno centro de la ciudad, en inmediaciones de la iglesia San Agustín y cuando se encontraba realizando compras de regalos y ropa en los locales ubicados en el lugar.
“La situación se registró cuando parqueaba mi carro porque pensaba adquirir una mercancía. En ese momento sentí que alguien golpeaba la puerta del conductor, robando mi atención pero era una patraña para que el otro sujeto se apoderara de mi bolso, aprovechando mi descuido”, indicó la funcionaria.
En medio de la tensión de la situación, la víctima descendió rápidamente del automotor para pedir ayuda. De esta forma, ciudadanos solidarios y policías que estaban cerca, salieron en ayuda de la representante de la ley, capturando a la persona que se prestó para facilitar el hecho delictivo. Esta última fue trasladada a las instalaciones de la URI, quedando así a disposición de la Fiscalía.
“Uno se pregunta si esas cámaras de seguridad están cumpliendo con el objetivo que tiene, salvaguardar al ciudadano. Es triste que esta situación se registre porque ya uno no quiere caminar por su ciudad por culpa de los delincuentes” acotó la afectada.
